martes, 18 de agosto de 2009

Dos arañazos y una Victoria

El Tigre de Diego Cagna arrancó la primera aventura internacional de su historia con un triunfo por 2 a 1 como local ante San Lorenzo. Los goles en este juego por Copa Sudamericana fueron convertidos por Martín Morel y Lucas Oviedo en el ganador, y Diego Rivero para los dirigidos por Diego Simeone. La revancha se disputará el 13 de septiembre en el Nuevo Gasómetro.

La ansiedad que experimentaba cada hincha del fútbol argentino llegó a su fin. Después de tantos conflictos la pelota volvió a rodar en forma oficial en nuestro país. Y aunque no fue en el marco del campeonato doméstico, este enfrentamiento entre Tigre y San Lorenzo por la Copa Sudamericana seguramente pone feliz a todo el mundo futbolero. Fue un duelo entre dos Matadores, y el más letal fue el de Victoria, haciendo la diferencia en los primeros minutos de la etapa inicial y teniendo que soportar el descuento azulgrana en el final de ese tiempo. Y justamente ese tanto de Diego Rivero puede ser clave para los dirigidos por Diego Pablo Simeone porque el gol de visitante vale doble en caso de igualdad en el resultado general.
El planteo de Diego Cagna fue su ya característico 4-3-1-2. Este esquema contó con el regreso al alto nivel futbolístico de Martín Morel, quien en la primera etapa fue la aduana de todos los ataques locales, y lo decoró con un tanto (el primero de su equipo) y un pase gol. También hay que destacar la actuación de Lucas Oviedo, volante por derecha del club de Victoria, que marcó la segunda conquista, y además fue muy profundo y veloz en las incursiones ofensivas por su banda. El ex jugador de San Martín de Tucumán, quien resultó ser el mejor del partido, llegó hace una temporada a Tigre y parece que esta vez finalmente tendrá un lugar entre los titulares habituales elegidos por Cagna.
Mientras tanto, Diego Simeone parece tener en su mente jugar con un solo punta definido, Gonzalo Bergessio, quien esta noche quedó muchas veces solo y en inferioridad numérica ante los centrales rivales, el debutante paraguayo Julio Manzur y Norberto Paparatto. San Lorenzo tuvo detrás de Lavandina a un mediapunta como Alejandro Gómez y, además, a Diego Rivero (autor del único gol de su equipo con un disparo cruzado luego de una buena escalada del uruguayo Pablo Pintos) y Fabián Bordagaray yendo y viniendo por derecha e izquierda respectivamente. El doble cinco fue de Cristian Leiva (uno de los estrenos azulgranas) y Juan Manuel Torres, quien resultó expulsado a poco del final del partido por pegarle sin pelota a José San Román.
Lo bueno y dinámico del primer tiempo, se transformó en monótono y de pierna fuerte en el segundo. Solo se puede destacar un cabezazo de Carlos Luna que Migliore salvó de manera brillante y una aproximación del Burrito Rivero que atajó muy bien Daniel Islas. No mucho más. Luego llegaría la ya comentada expulsión de Chaco Torres (abonado frecuente a esta clase de actitudes irresponsables) y el término del partido. Y al fin y al cabo, el resultado deja abierto el suspenso para la revancha del 13 de septiembre en el Nuevo Gasómetro. Porque Tigre no lo supo liquidar en el primer partido internacional de su historia y porque San Lorenzo convirtió como visitante.

Redacción: Claudio Darío Aimar
e-mail: caiaimardario@hotmail.com
Mi blog: www.explosiondeportiva.blogspot.com

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