viernes, 26 de junio de 2009

Un huracán de defensas

Omar Narváez hizo explotar el Luna Park y ganó por nocaut en el undécimo round, en la décima sexta defensa de su título mosca de la OMB

Ese hombre de 50 kilos es en realidad un gigante. Ese muchacho nacido en la fría Patagonia de Argentina que hizo que el Luna Park sea un hervidero con once mil personas gritando por él, es un supercampeón. Omar Narváez, "El Huracán", volvió a engrosar su larga lista de triunfos en defensas de su título, retuvo el cinturón mosca de la OMB y sigue metiéndose en la historia grande del boxeo nacional. Su víctima en la noche de ayer fue el mexicano Omar Soto, un púgil que hizo lo que pudo, pero que no estuvo al nivel de la categoría y sapiencia de Narváez (el campeón esquivó esporádicas ofensivas de Soto con un gran juego de cintura y culminó el combate casi sin golpes netos en contra). La inteligencia del argentino para caminar el ring y meter la estocada en el momento justo fueron claves en la pelea. Esa faena la terminó de concretar en el undécimo asalto, con una serie de golpes que finalizó en un zurdazo picante en la cara del retador. El mexicano cayó a la lona y el conteo decretó otra victoria más para el hombre de la Patagonia (nacido hace 33 años, más precisamente en Trelew, provincia de Chubut). Sin embargo, durante toda la velada se vio una neta superioridad de Narváez, dominante y rey del centro del ring en toda la noche del mágico e histórico Luna Park que vibró a la par de sus puños.
De este modo, Narváez sube su marca personal a 30-0-2 con 19 KO, además de conservar su título OMB mosca que recientemente fuese reclasificado con el mote de "súper campeón", un título que, aun a pesar de la adjetivación superlativa, aparentemente ya le queda chico. Por su parte, Soto vuelve a México tras una actuación digna y con una marca de 17-5-1 con 11 KO.
"El especuló y especuló, pensó que yo no iba a aguantar. Pero esperé y aproveché el momento. Le agradezco a toda la gente por el apoyo, eso es importante también, que ellos la hayan pasado bien", dijo "El Huracán", feliz. Como no te iban a acompañar Omar, si seguís escribiendo con tus guantes de acero el récord más importante del boxeo de nuestro país. Otra cosa: Francisco De Narváez dice en sus discursos políticos que es un tipo común... Pero haciendo un juego de palabras con sus apellidos, se puede afirmar que este Omar Narváez no es un campeón común, sino un supercampeón...


La derecha del argentino Omar Narváez se hunde como un Huracán en el rostro del pobre mexicano Soto. El supercampeón remató el combate en el undécimo asalto con un golpe de zurda sobre la cara del retador. De esta manera, engrosó a 16 su record de defensas del título mundial mosca de la OMB.









Redacción: Claudio Darío Aimar
e-mail:
caiaimardario@hotmail.com

1 comentario:

  1. Muy artística y elegante manera de expresar la fuerza del boxeador quien escribe su record con guantes de acero.Fue una frase bien patriótica , se hizo sentir el triunfo argentino de forma universal . Virtuosa forma de manifestar el éxito de Narváez / Carmen

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